Una investigación apoyada por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos ha descubierto que la medición de dos tipos de grasa en el torrente sanguíneo junto con la proteína C reactiva (PCR), un marcador de inflamación, puede predecir el riesgo de enfermedad cardiovascular de una mujer décadas más tarde. Estos hallazgos, presentados como investigación de última hora en el Congreso 2024 de la Sociedad Europea de Cardiología, se publican en el ‘New England Journal of Medicine’.
«No podemos tratar lo que no medimos y esperamos que estos hallazgos acerquen el campo a la identificación de formas aún más tempranas de detectar y prevenir las cardiopatías«, afirma el Dr. Paul M. Ridker, autor del estudio y director del Centro de Prevención de Enfermedades Cardiovasculares del Hospital Brigham and Women’s de Boston.
Para el estudio, los investigadores recogieron muestras de sangre e información médica de 27.939 profesionales sanitarios residentes en Estados Unidos que participaron en el Women’s Health Study. Las mujeres, que iniciaron el estudio entre 1992 y 1995 a una edad media de 55 años, fueron objeto de seguimiento durante 30 años.
Durante este periodo, 3.662 participantes en el estudio sufrieron un infarto de miocardio, un ictus, una intervención quirúrgica para restablecer la circulación o una muerte relacionada con problemas cardiovasculares.