A estas alturas la práctica del yoga se ha instalado de tal forma en nuestra sociedad que términos propios como asanas o pranayamas no suenan tan lejanos como tiempo atrás. Influencers de todo tipo que han divulgado los beneficios de este ejercicio han hecho mucho, pero también el boca a oreja: el yoga impulsa el necesario equilibrio cuerpo-mente. Si no tenemos mucho tiempo para el ejercicio diario, la llamada respiración de abeja es una buena idea.
El ritmo actual de vida hace que conseguir dicho equilibrio sea cada vez más difícil: horarios laborales que se alargan, las tareas del hogar, cuidado de la familia… Es difícil encontrar apenas 30 minutos para poder estar en calma e intentar reducir el estrés y ansiedad que se puede acumular a lo largo del día por múltiples circunstancias.
El yoga ofrece la ventaja de que puede practicarse de forma presencial en una clase diaria o bien seguir clases online que se pueden encontrar en innumerables canales. Si se desconoce el yoga lo ideal es decantarse por la primera opción para poder adaptar de forma adecuada el ejercicio a nuestra condición física.
Qué son las ‘pranayamas’
Se trata de un término familiar para todas aquellas personas que practican yoga hoy en día.