Asociado a comida, el término síndrome nos remite inmediatamente a una enfermedad o alergia provocadas por alimentos. Aquí hablamos de un potenciador de sabor, el glutamato monosódico, empleado para dar un sabor fresco a comida ultraprocesada, enlatada y también para aliños diversos que se utilizan en los restaurantes chinos y que pueden causar reacciones tan serias como dificultar la respiración.
El glutamato monosódico es un aditivo que, a día de hoy, no ha sido considerado peligroso por autoridades sanitarias de la entidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la FDA de Estados Unidoso o la Agencia Europea del Medicamento.
En la Unión Europea es obligatorio declararlo en las etiquetas y se ha recomendado rebajar las importaciones y el consumo, mientras que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha alertado de la hipersensibilidad que el aditivo pueden causar en algunas personas.
Sin evidencia científica
Los efectos de la sal china, ajimoto o umami, nombres coloquiales de esta sustancia, no se han descubierto recientemente sino que están bajo lupa desde hace décadas. A día de hoy, no hay evidencia científica para declarar la hipersensibilidad que provoca como una alergia. De hecho, estudios realizados han apuntado a que esa intolerancia detectada en comida china podría estar ligada más bien a reacciones alérgicas producidas por otros alérgenos,