En las personas mayores, ir andando cada vez más despacio a medida que pasan los años normalmente ha sido visto como un síntoma de debilidad y del inevitable deterioro físico de la edad. Sin embargo, parece ser que este cambio progresivo podría ocultar algo más.
El decline cognitivo, el hipocampo y la demencia
Por ejemplo, un estudio realizado por científicos estadounidenses y publicado en el medio especializado Neurology encontró que las personas que muestran este signo tienen un riesgo mayor de padecer cierto grado de deterioro cognitivo, con lo que también puede considerarse sintomático de este fenómeno. Al parecer, se relaciona con una disminución en el tamaño de un área del cerebro llamada hipocampo, asociada al procesamiento de la memoria.
Ahora, una gran investigación llevada a cabo sobre 17.000 adultos mayores de 65 años ha encontrado que las personas que andan un 5% más despacio cada año y además muestran otros signos de deterioro cognitivo tienen un riesgo especialmente elevado de desarrollar demencia, incluyendo alzhéimer. Los resultados de este trabajo se han publicado en el medio científico JAMA Network Open.
Decline dual
Concretamente, los autores realizaron un seguimiento de siete años a estos pacientes, a quienes anualmente realizaban tests para medir su deterioro cognitivo, su memoria,