Los padres que ejercen con frecuencia una disciplina severa con los niños pequeños los exponen a un riesgo significativamente mayor de desarrollar problemas de salud mental duraderos, según demuestra una nueva investigación, publicada en la revista ‘Epidemiology and Psychiatric Sciences’.
En su estudio sobre más de 7.500 niños irlandeses, investigadores de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y del University College de Dublín (Irlanda) descubrieron que los niños expuestos a una crianza «hostil» a los 3 años tenían 1,5 veces más probabilidades que sus compañeros de presentar síntomas de salud mental calificados de «alto riesgo» a los 9 años.
Los niños expuestos a una crianza «hostil» a los 3 años tienen más probabilidades de presentar síntomas de «alto riesgo» de salud mental a los 9 años
La crianza hostil implica un trato duro y una disciplina frecuentes, y puede ser física o psicológica. Puede consistir, por ejemplo, en gritar a los niños con regularidad, imponerles castigos físicos rutinarios, aislarlos cuando se portan mal, dañar su autoestima o castigarlos de forma impredecible en función del estado de ánimo de los padres.
Síntomas internos y externos
Los investigadores analizaron los síntomas de salud mental de los niños a los 3, 5 y 9 años. Estudiaron tanto los síntomas de internalización de la salud mental (como la ansiedad y el retraimiento social) como los de externalización (como el comportamiento impulsivo y agresivo,