“El sueño saludable es aquel que se adapta a las necesidades de la persona y su entorno, es satisfactorio, tiene una duración y horario adecuado, es eficiente sin periodos de despertar durante la noche y permite una alerta sostenida durante las horas de vigilia». Esta afirmación de la doctora Ana Fernández Arcos, de la Sociedad Española de Neurología (SEN) nos pone sobre la pista de lo que debería ser.

Sin embargo, en España, los trastornos del sueño afectan a un 48 por ciento de la población, y 4 millones lo sufren en su versión crónica y grave.

«Un descanso deficiente (como puede ser dormir menos de 6 horas diarias) puede tener consecuencias graves, y se asocia a problemas de salud mental, emocional y física. Además, las personas con enfermedades crónicas, miembros de minorías y personas en situación de precariedad pueden tener grandes dificultades para mantener unos hábitos de sueño óptimos».

¿Qué es la higiene del sueño?

Cuando descansamos menos horas de las necesarias, la secreción de melatonina (hormona que produce nuestro cerebro y que interviene en el ciclo natural del sueño) se ve alterada, por lo que se produce un desajuste en nuestro ciclo del sueño-vigilia. La incapacidad de dormir bien genera estrés en el organismo, que puede afectar a cualquier actividad.

 » Leer más