La cena es una comida que, aunque no la más importante, debería centrar nuestra atención en igual medida que las que hacemos durante el día. En algunos casos se abandona reduciéndola a la mínima expresión, en otros, se echa de mano de ultraprocesados para que el trámite sea rápido, y también puede ser que caigamos en cenas copiosas y pesadas que van a incidir irremediablemente en la calidad del sueño. ¿Existen, en cambio, alimentos que nos ayudan a dormir?
La nutricionista Rosa Fernández respondería a esta pregunta con un rotundo sí. De hecho, apunta a alimentos concretos que por su contenido en triptófano y magnesio son los más aptos para fomentar la producción de melatonina y, por tanto, ayudarnos a conciliar el sueño. En este sentido habla de lácteos como el yogur y la leche, los plátanos, las nueces o los crepes de avena.
Y si bien la cena es un elemento fundamental para conciliar el sueño, ya que lo que comemos y bebemos serán determinantes en ese proceso, tampoco hay que olvidar el resto de factores que intervienen en tener más o menos facilidad para caer en los brazos de Morfeo: desde los estímulos lumínicos a los dispositivos electrónicos o el control de la respiración.
Efectos del triptófano y magnesio
El triptófano es un aminoácido esencial precursor de la serotonina,