“En esta pandemia, los registros constatan que la enfermedad renal crónica avanzada (ERCA) representa el factor de riesgo más frecuente en la población general que ha sufrido el virus SARS-CoV-2 de forma severa, y también el que más aumenta la probabilidad de padecerlo (excluyendo la edad avanzada)”, destaca la doctora María Soledad Pizarro, del servicio de Nefrología del Hospital Rey Juan Carlos (Móstoles, Madrid).
Pero, ¿qué es concretamente la ERCA? Se trata de la enfermedad renal crónica avanzada, una patología que en nuestra sociedad actual está cogiendo cada vez más protagonismo al estar convirtiéndose en una de las causas de muerte que más están aumentando en estos últimos años. ¿Cuál es el problema? “Que es una ‘enfermedad silenciosa’, muy difícil de detectar, ya que en estadios iniciales es una patología asintomática. Además, cuando aparecen los síntomas, en fases ya muy avanzadas, estos suelen ser inespecíficos”, añade la especialista.
Así, los expertos estiman que hasta un 10% de la población puede padecer enfermedad renal crónica, un problema que aumenta con la edad, ya que la mitad de los mayores de 75 años sufre esta patología. «Al ritmo actual de crecimiento, para el año 2040 podría haberse convertido en la quinta causa de muerte a nivel mundial. Y, según los pronósticos, antes de que acabe este siglo,