A menudo aparecen estudios y fórmulas que nos invitan a evaluar nuestro nivel de longevidad, con unos sencillos ejercicios que nos dan una pista. La velocidad a la que caminamos, ser capaces de levantarnos del suelo sin apoyar las manos en las rodillas, o mantenernos en equilibrio sobre una sola pierna son algunos de los movimientos que pueden proporcionarnos información sobre envejecimiento prematuro y longevidad.
En este caso, una investigación publicada en el British Journal of Sports Medicine, que estudió a más de mil personas (hombres y mujeres de 50 a 70 años) concluyó que aquéllos que no son capaces de mantenerse en equilibrio sobre una sola pierna durante 10 segundos (lo que popularmente se conoce como ‘pata coja’) tienen el doble de posibilidades de fallecer en la década posterior, en comparación con quienes sí superan la prueba.
Lo que dice el equilibrio de nuestro envejecimiento
El envejecimiento lleva asociado un declive de la forma física, la fuerza muscular y la flexibilidad. El equilibrio, por su parte, es algo que suele mantenerse en orden en torno a los 50 años. Es a partir de esta edad cuando empieza un decaimiento más acelerado. No poder mantener el equilibrio lleva como consecuencia un mayor riesgo de caídas, por ejemplo, así como un deterioro de la capacidad cognitiva.