La donación de esperma es considerada en España como un acto solidario y altruista que permite que muchas personas que tienen dificultades para tener hijos puedan ser padres por inseminación artificial o fecundación in vitro. Pero, ¿cuáles son las condiciones que hay que cumplir? ¿Se puede ganar dinero?
En primer lugar, el proceso de donación de semen es muy sencillo al no requerir una intervención quirúrgica como sí sucede con la donación de óvulos. El esperma permanece congelado en un banco de esperma en las clínicas habilitadas para tal fin con el propósito de ser utilizado después para un tratamiento de reproducción asistida.
Este proceso es completamente anónimo y no puede tener un carácter comercial, por lo que no se recibe un beneficio económico por la donación. Así lo especifica la Ley 14/2006 sobre técnicas de reproducción humana asistida en el artículo 5: «La compensación económica resarcitoria que se pueda fijar solo podrá compensar estrictamente las molestias físicas y los gastos de desplazamiento y laborales que se puedan derivar de la donación».
Por tanto, no se paga por el esperma al ser ilegal, sino como compensación por acudir hasta el centro médico. Esta cantidad depende de cada institución o clínica y suele oscilar entre los 30 y los 50 euros por donación.