Casi un tercio de la población en España refiere problemas de interrupción del sueño, con una mayor prevalencia entre las mujeres en la edad adulta. Existen todo tipo de trastornos del sueño, desde las personas que no consiguen conciliarlo cuando se acuestan, hasta aquellas que lo ven interrumpido varias veces en la noche, algo que podría repercutir negativamente en la salud general y que suele agravarse con el paso de los años.
Cada vez más, las consultas médicas se llenan de pacientes que buscan ayuda para poder descansar durante la noche, aquejados de insomnio. Sin embargo, y a pesar de que a medida que cumplimos años los trastornos del sueño aumentan, un reciente estudio establece el número concreto de despertares involuntarios que nos podrían hacer pensar que tenemos un problema. Obviamente, si no descansamos durante el sueño, la siguiente jornada va a ser dura.
A partir de los 60 años, los ritmos circadianos cambian
Todos, en un momento u otro, hemos podido tener épocas en las que nos hemos desvelado más veces por la noche, lo que a su vez suele generar ansiedad al no conseguir volver a conciliar el sueño. Sin embargo, más allá de situaciones puntuales de nerviosismo o preocupación que pueden afectar a nuestro descanso nocturno, los expertos establecen una serie de pautas que nos harán ver si nuestras interrupciones son ‘normales’.