Frecuentemente, a la hora de medir nuestra temperatura corporal para comprobar si padecemos fiebre empleamos como referencia los 36,5 grados centígrados. Sin embargo, esto es una generalización y es algo inexacto: la temperatura corporal óptima varía entre cada persona, con algunos saltos importantes en función de varias circunstancias.
¿Cuál es la temperatura idónea en adultos?
Tal y como señala el medio Medical News Today, la temperatura corporal media en los adultos está alrededor de los 37º, recordando que existen pequeñas variaciones interpersonales que pueden llegar a ser significativas.
Además, no hay que olvidar tampoco que la temperatura corporal ofrece valores diferentes según cómo se mida: si es en la axila, marcará más baja de lo que lo hará en el recto.
Otros factores que pueden afectar a nuestra temperatura corporal incluyen la edad, la hora del día (típicamente, es más baja en la mañana y más alta por la tarde-noche), la actividad reciente (el ejercicio intenso eleva la temperatura) y la ingesta de comida y líquidos.
Igualmente, se sabe que las personas más mayores tienden a tener temperaturas más bajas que las más jóvenes, y que ciertas condiciones de salud pueden disminuirla (el hipotiroidismo) o aumentarla (el cáncer). El origen étnico puede también tener influencia en este aspecto.