Al igual que les ocurre a los seres humanos, los perros también pueden tener problemas en las articulaciones, como artrosis. Esto ocurre, como en el caso de las personas, más frecuentemente en perros mayores, grandes o con una gran actividad física. Para que esto no ocurra, que lo haga de forma más leve o para aminorar algunos de los síntomas de alguna de estas patologías, existen los condroprotectores, suplementos alimenticios destinados a proteger las articulaciones y los huesos de los canes. Veamos en qué casos y cuándo sería recomendable usarlos.
¿Qué son los condroprotectores y cómo funcionan?
Los condroprotectores son unos suplementos a base de sustancias de origen natural que se utilizan para proteger las articulaciones de problemas como la artrosis y otras patologías articulares, especialmente derivadas de la degradación del cartílago. Una vez aparecidas estas patologías, los cordoprotectores no las curan, pero sí ayudan a que no progresen y alivian algunos síntomas, como el dolor, la inflamación y la rigidez.
Hay que aclarar que los condroprotectores no sirven para prevenir la artritis, que es una enfermedad inflamatoria y no se puede prevenir.
Aunque varían de un tipo de condroprotector a otro, en general, los componentes que más vamos a encontrar en estos suplementos son:
Glucosamina: Es el componente más abundante en los cartílagos y en las articulaciones y ayuda a repararlos cuando hay un daño.