La decisión de adoptar una dieta vegetariana o vegana puede llevar consigo el miedo a dejar de contar con nutrientes importantes. Tradicionalmente se ha asociado una dieta saludable a la que incluya carne y pescado, si bien en la actualidad la ciencia se ha interesado por el papel de vegetales, legumbres y frutas en nuestro bienestar, alimentos con los que también se puede encontrar un buen equilibrio dietético.
En primer lugar, es importante tener en cuenta que, a no ser que en consulta médica alerten de algún déficit, la suplementación, en principio, no es necesaria. Dicho esto, es cierto que hay una tríada especialmente clave que debemos tener en cuenta, los niveles de vitamina B-12, hierro y ácidos grasos omega 3, éstos últimos especialmente presentes en proteína animal.
Vitamina B-12
La vitamina B-12 tiene diversas funciones esenciales para el organismo, entre ellas, el metabolismo celular o la producción de ADN. Como fuentes alimentarias de esta vitamina se han indicado históricamente la carne roja y pescado como las más efectivas. Y aunque efectivamente es así, no son las únicas opciones ya que los huevos, la leche y otros productos lácteos son también una fuente importante, por lo que una persona vegetariana podría intensificar así este nutriente.
Podemos ver esta vitamina como agregada en diversos alimentos procesados como los cereales,