Aunque el boom de la barba hispster parece haber terminado, todavía son muchos los que se animan a lucir una barba poblada, un aspecto de nuestro físico que hay que cuidar a diario para lucirla perfecta. Y es que, aunque las bufandas y las mascarillas oculten en gran parte este vello facial, no podemos descuidarnos si queremos mantenerla en perfecto estado (y para seguir manteniendo la creencia de que somos los más atractivos. O eso dice la ciencia). Por otra parte, aquellos que optan por un afeitado apurado e, incluso, un rasurado completo, tampoco se libran de tener que invertir parte de su tiempo acicalándose. Claro que todo es más sencillo si se cuenta con una buena herramienta para llevar a cabo cualquiera de los dos looks.
Por ello, en nuestra rutina de afeitado debemos incluir artículos y dispositivos que nos ayuden a darle a nuestra barba la forma que deseamos. Por ejemplo, si lo que nos gusta es lucir una barba con efecto de 3 o cuatro días, tan solo necesitaremos recortar el vello y definir con precisión las líneas que delimitan el vello facial. Si, por el contrario, optamos por un rasurado completo, hay que echar mano de aliados que consigan eliminar todo el pelo sin rastro de sufrimiento en nuestra piel.