Las pantallas de móviles, ordenadores y tablets tienen un protagonismo preocupante en nuestro tiempo de ocio. No es una novedad que debemos concienciarnos sobre lo que supone su uso durante horas para la salud, desde fatiga ocular a trastornos del sueño. Ahora la ciencia ha ido más allá, sumando a estas alteraciones la incapacidad de mantener relaciones sexuales satisfactorias.
El estudio lo ha llevado a cabo un equipo científico chino y acaba de publicarse en la revista Andrology, dando cuenta de unos resultados basados en el análisis de los datos de más de 200.000 participantes. Aunque en sus resultados establecen una relación causal, indican que son necesarias más investigaciones para hablar de resultados definitivos.
En la repercusión de diversos hábitos sobre la disfunción eréctil, este equipo científico ha comparado los resultados del uso del ordenador con otras formas de ocio como la televisión o la conducción, si bien en el primer caso la relación causal es especialmente relevante en términos porcentuales. Además, han logrado cuantificar cuándo el tiempo del uso del ordenador empieza a ser dañino o, en otras palabras, cómo se incrementa la probabilidad de sufrir este trastorno.
Estudios previos ya se habían ocupado de medir cómo influye el comportamiento sedentario en la disfunción eréctil.