Con la llegada del verano, es común encontrar diversas especies de medusas en las costas españolas. Entre ellas, destacan la medusa avispa de mar y también la carabela portuguesa que, aunque no es una medusa, también puede suponer un riesgo para los bañistas. Estas son las características de la medusa avispa de mar y de la carabela portuguesa, cómo actuar ante sus picaduras y en qué zonas de España se encuentran, según el Institut de Ciències del Mar-CSIC.
Medusa avispa de mar
Descripción: La medusa avispa de mar (Carybdea marsupialis), también conocida como cubomedusa o cubozoo, tiene un cuerpo en forma de cubo de unos 5 centímetros y cuatro tentáculos de 20 a 30 centímetros de longitud. Posee 24 ojos agrupados en ropalias. Es la única cubomedusa en el mar Mediterráneo y, aunque muy urticante, su veneno no es mortal.
Síntomas de la picadura: La picadura de la avispa de mar produce un intenso dolor y provoca ronchas rojizas en la piel, con una fuerte sensación de picor. En casos excepcionales, puede causar calambres musculares, vómitos, cansancio y ansiedad.
Qué hacer ante una picadura:
Acudir a un profesional sanitario o al puesto de socorro de la playa.
Lavar la zona afectada con vinagre normal.
Retirar los restos de medusa con una tarjeta,