Los mensajes sobre el entrenamiento y la mejora del rendimiento físico están habitualmente asociados a la juventud. Y esto es un gran error cuando la sociedad ha evolucionado hacia una consciencia mucho mayor que antaño sobre la importancia de la actividad física en la tercera edad, tanto si se ha practicado deporte en años previos o no. El deporte no tiene edad y prueba de ello es el testimonio de Pattie DeLoatche, una mujer de 64 años que no duda en correr maratones.
De hecho, DeLoatche no duda en afirmar que ahora, superando la barrera de los 60, está en la mejor forma que ha tenido en su vida, y eso es importante teniendo en cuenta que tiene un pasado de atleta, si bien había dejado los entrenamientos para recuperarlos recientemente, en concreto durante la pandemia por covid-19.
Basándose en su experiencia profesional, DeLoatche modera el triunfalismo y es consciente de las limitaciones que pueden suponer las enfermedades muscoesqueléticas, como la artritis o la artrosis, presentes a partir de los 60 años en la población, y de forma especial entre las mujeres. Sin embargo, anima a que estas condiciones no nos amilanen: “Tienes que empezar por algún lado y simplemente salir y hacerlo. Yo ni siquiera pienso en ello;