La Navidad ya está a la vuelta de la esquina y con ella las luces, los mercadillos navideños, los turrones, los belenes… y el árbol de Navidad que muchos españoles ponen en sus casas. Este elemento decorativo típico de esta época del año puede ser natural o artificial, pero en ambos casos, el propietario debe saber que puede causar problemas de salud.
Nos referimos al conocido como ‘síndrome del Árbol de Navidad‘, síndrome que tiene como síntomas principales problemas de respiración como la congestión nasal, así como estornudos y dolor de garganta. ¿Por qué se produce este síndrome y cuál es la diferencia entre un árbol natural y otro artificial?
Los riesgos para la salud del árbol de Navidad natural
Los árboles naturales tienen esporas de moho y polen que se meten dentro de casa. Además, el calor del hogar fomenta el crecimiento del moho, el cual se desarrolla en entornos cálidos y húmedos.
Su aparición en el interior de la vivienda da lugar a problemas como congestión nasal, dolor de garganta, tos, estornudos, picor de ojos o alergias en la piel, tal y como señalan desde los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC).
«La gente con asma o aquellos alérgicos al moho pueden tener reacciones graves.