Una investigación española publicada en Nature revela una nueva técnica que permite conocer los «códigos de barras» escritos en nuestro ADN y que nos ayudan a saber cómo envejece la sangre, un primer paso para las terapias antienvejecimiento y los cribajes tempranos de enfermedades como la leucemia.
El descubrimiento, que firman científicos del Centro de Regulación Genómica (CRG) y el Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona), ha sido posible tras un estudio con donantes de médula y ratones.
Tanto en unos como en otros, las células madre sanguíneas envejecen reduciendo su diversidad y favoreciendo tipos asociados o «clones» que llevan a la inflamación crónica, unos cambios que son «casi universales» a partir de los 60 años.
«Hemos conseguido poner un código de barras, un apellido, a esos tipos de células clones que reducen la diversidad y robustez del sistema», ha explicado en rueda de prensa el jefe de grupo en el Centro de Regulación Genómica (CRG), Lars Velten, quien ha coliderado el estudio junto al investigador del IRB Alejo Rodríguez-Fraticelli.
Rodríguez-Fraticelli ha querido destacar que este hallazgo ha sido posible gracias a una técnica desarrollada en Barcelona que permite seguir los «códigos de barras» del ADN en sangre durante largos periodos de tiempo, lo que da alas a estudiar terapias de rejuvenecimiento directamente en humanos,