La adicción al trabajo es un comportamiento obsesivo-compulsivo por el que la persona tiene una necesidad constante e incontrolable de estar ocupado laboralmente. A veces, no somos conscientes de sufrirla.
Andy Brown, es coach y orador, yen un reportaje publicado por el Daily Mail, da algunas claves para poder autodiagnosticarse y consejos para sobrellevar esta adicción.
«Mucha gente nunca admitiría ser adicta al trabajo, pero las señales están ahí. A menudo son quienes los rodean los que lo ven con mayor claridad: la pareja que se queda sola con los hijos todas las noches o los amigos que ya no envían mensajes de texto porque ya saben que la respuesta será ‘esta noche no, tengo que trabajar», dice Brown.
Estas son, según Brown, las cinco señales de que eres adicto al trabajo.
1. Echas horas de más
En primer lugar, si trabajas constantemente hasta altas horas de la noche y los fines de semana, es posible que seas un adicto al trabajo.
Esto puede suponer que sacrificas horas de sueño o tiempo de inactividad con tus seres queridos para responder correos electrónicos o iniciar sesión en los sistemas de trabajo.
2. Eres incapaz de desconectar
Este rasgo puede presentarse cuando te cuesta relajarte o te resulta difícil dejar de pensar en el trabajo durante su tiempo fuera de la oficina.