En España, cada vez existe una mayor (y mejor) cultura de las infusiones que, correctamente elaboradas, pueden ayudarnos a combatir un sinfín de dolencias de la manera más natural. Existen hierbas para casi todo, y vamos a ofrecer una guía con 10 pequeños trastornos de salud que pueden surgir en el día a día, y la manera de combatirlos con la infusión adecuada.
Menta, jengibre, alcachofa, hinojo… la naturaleza nos sirve en bandeja un buen número de soluciones para problemas digestivos, de descanso, para calmar los nervios o ayudarnos a bajar la tensión. Para tener claros los usos de cada planta, hemos consultado a Jesús Cía Asensio, director general de Josenea, especializados en el cultivo bio de infusiones y tés.
1. Digestiones pesadas: infusión de alcachofa
La elaboración de esta infusión con superpoderes sobre las digestiones pesadas tras una comida con exceso de grasa es igual que la mayoría: añades las hojas secas de alcachofa y agua hirviendo. La alcachofa es rica en antioxidantes y vitaminas C y K.
Como norma general, el experto nos recuerda que una infusión no debe permanecer ‘macerando’ la hierba más de 4 minutos, puesto que a partir de ahí empezaría a perder propiedades saludables.
A partir de ahí, la infusión de alcachofa (a la que puedes añadir unas gotas de limón para contrarrestar su sabor amargo) contribuye a reducir la acidez estomacal tras una comida copiosa.